La gestión estratégica es un enfoque que permite a las organizaciones definir su rumbo a largo plazo, adaptarse a los cambios del entorno y aprovechar al máximo sus recursos. Se trata de un proceso continuo y cíclico que integra análisis, formulación, implementación y evaluación de estrategias. El proceso inicia con un análisis del entorno interno y externo para identificar oportunidades, amenazas, fortalezas y debilidades. Luego, se pasa a la formulación de estrategias, donde se definen objetivos y se seleccionan las acciones más adecuadas para alcanzarlos. La implementación estratégica implica poner en marcha los planes, asignar recursos y coordinar esfuerzos en toda la organización. Finalmente, la evaluación y control estratégico permite medir los resultados, compararlos con los objetivos y realizar los ajustes necesarios para mantener la competitividad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario