La investigación es un proceso sistemático, objetivo y planificado que busca generar, ampliar o comprobar conocimientos, se apoya en métodos científicos para obtener datos fiables, analizarlos e interpretarlos con el fin de responder preguntas, resolver problemas o desarrollar teorías. Existen distintos tipos de investigación según su propósito (básica o aplicada), enfoque (cualitativa, cuantitativa o mixta) y alcance (exploratoria, descriptiva, correlacional, explicativa). Todas comparten elementos esenciales como la formulación de un problema, la revisión de literatura, el diseño metodológico, la recolección de datos, el análisis y la presentación de resultados. Su importancia radica en que permite innovar, optimizar procesos, sustentar políticas públicas, tomar decisiones empresariales y aportar soluciones en áreas como la salud, la economía, la educación o la tecnología.
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